Ley de morosidad

Ley de morosidad

Ley de morosidad

¿Qué es la ley de morosidad?

(Por Asesoria Hipólito, su Asesoría en Sevilla)

La ley de morosidad tiene como fin combatir la morosidad en el pago de deudas dinerarias y el abuso, en perjuicio del acreedor, en la fijación de los plazos de pago en las operaciones comerciales que den lugar a la entrega de bienes o a la prestación de servicios realizadas entre empresas o entre empresas y la Administración.

Plazos de pago de la ley de morosidad

Desde el 7 de julio de 2010 está vigente una importante modificación de la ley de morosidad, la Ley 15/2010  que fija desde 2013 unos plazos máximos de pago en las operaciones comerciales de 60 días en el caso de la empresa privada y de 30 días en el caso de las Administraciones Públicas, a contar a partir de la entrega de los productos o prestación de los servicios.

Originalmente la morosidad viene regulada por la Ley 3/2004 de medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales.

La modificación de la ley de morosidad estableció un periodo de adaptación de dos años desde su aprobación en 2010 hasta 2013, en los que la reducción de plazos de pago se debía ir aplicando de forma progresiva, tanto en el sector público como en el privado.

En el caso de la empresa privada y por tanto de los autónomos, la ley establece que se debía pagar a los proveedores en un plazo de 85 días como máximo en 2010 y 2011, de 75 días en 2012 y finalmente de 60 días desde 2013. Se establecía una excepción para los productos de alimentación frescos y perecederos, en lo que se fijó el plazo máximo de pago en 30 días desde el año 2010.

Por lo que se refiere a la Administración Pública, en 2011 el plazo máximo era de 50 días, en 2012 de 40 y desde 2013 de 30 días.

La ley también contempla la posibilidad de reclamar intereses de demora e indemnizaciones por los costes de cobro a los que se tuviera que hacer frente. Sin embargo en la gran mayoría de los casos no se solicitan por temor a que el cobro se retrase todavía más.

Indemnización por costes de cobro según la ley de morosidad

Según la ley de morosidad; cuando el deudor incurra en mora, el acreedor tendrá derecho a reclamar al deudor una indemnización por todos los costes de cobro debidamente acreditados que haya sufrido a causa de la mora de este. La indemnización no podrá superar el 15% de la cuantía de la deuda, excepto en los casos en que la deuda no supere los 30.000 euros en los que el límite de la indemnización estará constituido por el importe de la deuda de que se trate.

El deudor no estará obligado a pagar la indemnización establecida en el apartado anterior cuando no sea responsable del retraso en el pago.

 Cláusulas abusivas en la ley de morosidad

1. Serán nulas las cláusulas que tengan un contenido abusivo en perjuicio del acreedor.

2. Serán igualmente nulas las cláusulas abusivas contenidas en las condiciones generales de la contratación.

3. Las siguientes entidades podrán suspender y modificar las condiciones comentadas en el apartado anterior:

a. Las asociaciones, federaciones de asociaciones y corporaciones de empresarios, de profesionales, de trabajadores autónomos y de agricultores.

b. Las Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación.

c. Los colegios profesionales legalmente constituidos.

¿Cómo determinar si una cláusula es abusiva?

Según la ley de morosidad; para determinar si una cláusula es abusiva para el acreedor; se tendrá en cuenta si el deudor tiene alguna razón objetiva para apartarse del plazo de pago y del tipo legal de interés de demora; y si sirve principalmente para proporcionar al deudor una liquidez adicional a expensas del acreedor; o si el contratista principal impone a sus proveedores o subcontratistas unas condiciones de pago que no estén justificadas.

Desde Asesoría Hipólito esperamos que el artículo anterior sobre la ley de morosidad le sirva de ayuda. Para cualquier duda consúltenos a través de nuestra página web o teléfono de contacto.

 

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